2/12/08

FRACASO DE INCENTIVOS


Un quinto piso, algún edificio de Manhattan. Chuck Mangione hace sonar su Give it all you got desde un viejo tocadiscos; Rilke no muy a gusto desde su parnaso habla con los ángeles; y el inquilino, el pobre inquilino, en el intento de escribir una de esas novelas trascendentales, fuma torpemente otro cigarrillo, pensando que tal vez así le salga algo bueno; pero ni el vino italiano le ha dado algo que pueda presumirle al espejo esta semana. Pensó que quizá la puta que sacó del furioso Central Park podría orientarlo por lo menos hacia un rumbo bukowskiano (ya qué, algo es algo), pero por culpa del maldito bloqueo, ahora tendrá que ver cómo se deshace de ese bello cuerpo desnudo antes de que apeste el departamento.




Gabriel Gutiérrez-Ferri

4 comentarios:

Anónimo dijo...

No se xq tengo el presentimiento ke no has salido ni sikiera de la ruta del café y te atreves a escribir sobre ese planeta lejano ke es Nueva York jajaja Buen intento de cuento fantastico

Anónimo dijo...

a mi me parece muy interesante tu cuento...
Escribes muy padre
y esta pagina me encanta
siempre leo lo que ponen en ella
saludos
Nianis

Anónimo dijo...

Si la premisa fuera haber estado en el lugar para escribir sobre él. Triste sería el librero de la literatura. No Shelby. No es necesario haber ido a NY para escribir sobre NY. Como tampoco es necesario haber matado a alguien para actuar como tal en cine o en teatro. Escribir es viajar sin viajar, espero lo puedas entender así. No sé si tu presentimiento es cierto o no, la verdad no me importa. Pocas veces es necesario meterse a la vida y en las experiencias de un escritor para disfrutar lo que hace. Lo que sí, es que no es un cuento fantástico, no genera dudas sobre la realidad, es un micro cuento negro, así como hay novela tal. /\\/

Anónimo dijo...

Era sarcasmo la parte de "cuento fantastico"...